jueves, 13 de noviembre de 2014

El Black Bass

            

   El Black Bass:

INTRODUCCIÓN Y DISTRIBUCIÓN 



 El black bass,  perca americana o, simplemente,  el bass, es una especie introducida en nuestras aguas en la década de los 50.


A partir de 1955 y durante una par de años, se fueron realizando sueltas piloto en algunos embalses de nuestra geografía, intensificando las repoblaciones ya con ejemplares reproductores nacidos en España. Una vez observada la buena aclimatación de la especie, se fueron realizando nuevas introducciones de black bass en más de 30 provincias hasta finales de la década de los 60.


En la actualidad, podemos encontrar el black bass en casi todo el territorio nacional, sólo en el tercio norte la adaptación de este centrárquido ha tenido poco éxito.


Aunque es considerada una especie invasora y amenaza a la mayoría de las especies autóctonas, su pesca deportiva está regulada por las Normativas de Pesca de todas las comunidades autónomas.


En nuestro país, la afición a este pez ha crecido de tal manera que se han creado innumerables clubes de pesca dedicados exclusivamente al black bass, celebrándose multitud de campeonatos y torneos, incluyendo europeos y mundiales, tanto desde embarcación como desde orilla

HÁBITAT



 Es un pez que prefiere aguas relativamente cálidas, por lo que la máxima actividad del black bass la observaremos en primavera, entre los meses de marzo y junio, y en otoño, entre los meses de septiembre y noviembre, con temperaturas del agua entre los 19 y 22 grados. En verano, deberemos de intentar su captura en las primeras horas del día y al atardecer. Si queremos tentarlo en las horas centrales de los días calurosos lo deberemos hacer buscándolo en el fondo, por estar el agua más templada que en la superficie. 
 En invierno, la actividad es casi nula, porque las bajas temperaturas mantienen su metabolismo inactivo, por lo que deberemos intentar su captura en las horas centrales del día y en aquellas zonas resguardadas donde la temperatura del agua sea más alta.


Frecuenta los lugares próximos a las orillas con cierta profundidad y realiza escasos desplazamientos. Es sedentario y muestra inclinación por aguas de escasa corriente o estancadas, con fondos de arena y fango, en zonas con abundante vegetación emergente y sumergida o con cualquier obstáculo, ya sean troncos, zonas de piedras, pilares de puentes y embarcaderos. Estas zonas permiten su desarrollo en cualquier etapa de su vida, ya sea en la de crecimiento, en la que le proporcionan cobijo frente a otros depredadores, o en su etapa adulta, en la que las utilizan como apostaderos para acechar a sus presas. Aguanta aguas contaminadas y poco oxigenadas


De todas formas, no deberíamos desdeñar otras zonas en las que, por su comportamiento y preferencias, no sería habitual encontrarlo.

ALIMENTACIÓN


Cuando es alevín, su alimentación es fundamentalmente planctónica, aumentando el tamaño de sus víctimas a medida que aumenta el suyo propio. A partír de los 5 cm. ya es capaz de comer otros pececillos.


Cualquier ser vivo con el tamaño suficiente para entrar en su boca y que se acerque a su radio de acción, está prácticamente perdido y es seguro que le servirá de alimento. Larvas y ninfas, cualquier insecto, preferentemente libélulas, crustáceos, gusanos y lombrices, moluscos, cangrejos, otros peces y también, pequeños mamíferos y aves. En definitiva, todo aquello que se mueva.


Habitualmente permanece al acecho, sorprendiendo a su presa con una rápida carrera, impulsándose con su potente aleta anal. Cuando está a punto de alcanzar su objetivo, abre su boca y ensancha sus agallas, formándose una corriente de succión que arrastra su alimento hacia su boca. Este proceso lo pueden invertir en el momento que detectan algo extraño en su captura, expulsandolo rápidamente de su boca. 

COMPORTAMIENTO


Como la mayoría de depredadores, en sus primeros años forma grupos numerosos con otros individuos, haciéndose más solitario a medida que que va creciendo. En su etapa de adulto, rara vez lo veremos con más de uno o dos compañeros, aunque si podremos observar una tendencia a reunirse en grupos en algunos lugares y a ciertas horas del día. El black bass es un pez muy sensible a las variaciones térmicas, lo que provoca el desplazamiento de grandes grupos a zonas con temperaturas estables.


Su comportamiento no sigue un patrón definido y es muy variable, en pocos minutos pueden pasar de la pasividad más absoluta ante todos los señuelos que les mostremos a una agresividad frenética sobre todo lo que se mueva a su alrededor. Los cebos de éxito de un día pueden no surtir ningún efecto al día siguiente. Muy voraz y territorial, sólo después de la freza, en la que ha perdido mucha energía y necesita recuperarla rápidamente, y mientras protege sus nidos y a sus alevines, el black bass entrará a todo lo que le lancemos cerca.


El black bass es un pez impulsivo y realiza sus ataques con una ferocidad fuera de lo común pero, si falla en el primer intento, desiste de la persecución de la presa. 

MODALIDADES DE PESCA


 Por ser tema de un artículo aparte, apuntaremos que tres son las modalidades principales que se utilizan para la pesca del black bass: spinning, casting (de la que vamos a tratar) y mosca.



  

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